Conversatorio en Londres: Discurso retos y ventajas del proceso de paz
Rodeemos el Diálogo agradece la oportunidad de participar en este conversatorio. ReD se fundó en Londres en septiembre 2012, poco después del lanzamiento oficial de los diálogos de paz en La Habana, para ser una fuente de apoyo desde la sociedad civil hacia las negociaciones y la idea de la salida negociada al conflicto armado colombiano, y para promover un mayor conocimiento de los acontecimientos y acuerdos. Además, a lo largo de estos tres años, hemos venido fomentando una cultura de diálogo en los espacios donde realizamos nuestras actividades, como herramienta individual y social para la superación de los conflictos. Existen dos capítulos, uno en Londres y otro en Bogotá, y damos la bienvenida siempre a quienes deseen integrarse tanto en los núcleos de trabajo como desarrollar alianzas estratégicas favor de nuestras metas en común. Cabe repetir, entonces, nuestro aprecio para Conciliation Resources, quienes nos invitaron a hacer parte de esta mesa, y las otras organizaciones aquí presentes. En la misma conexión, es de destacar que el presente discurso es el producto de varias manos, un esfuerzo mancomunado y consensuado que refleja la postura y los sentimientos de nuestros adherentes.
Se comprenderá entonces que el recién firmado acuerdo sobre la justicia transicional en el pos-acuerdo, nos llenó de alegría y optimismo. Tal y como publicamos en nuestro comunicado poco después del anuncio del mismo, destacamos que lo acordado entre las partes encuentra un equilibrio entre las exigencias de la verdad, la justicia, la reparación y la no-repetición, teniendo en cuenta los derechos y las necesidades de las víctimas para evitar la impunidad, y las realidades de una negociación política. Lo que se da, en efecto, es una herramienta a cuya base se encuentran una especie de zanahoria y garrote, con beneficios jurídicos a cambio de la verdad e – importantemente – la disposición de cumplir con medidas las restaurativas que se puedan establecer. Esta, la Jurisdicción Especial para la Paz, se suma a la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición como instrumento del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición. Cuya forma final aún está en desarrollo, pero que ya cuenta con mecanismos para buscar la satisfacción de las necesidades de la verdad y la justicia.
Para que la no-repetición tenga mayor posibilidad de éxito, es necesario entonces que se defina mejor cómo se estructurarán las medidas restaurativas, que quedaron en manos del Tribunal para la Paz. Y hacemos eco a la observación de la Coordinación Colombia-Europa-EEUU, quienes llaman la atención a la importancia de la transparencia en la selección de jueces para las Salas de Justicia y el Tribunal. Se sabe que contarán con una mayoría de jueces nacionales, además de la participación de una minoría de jueces extranjeros. Sobra decir que deben ser sin mancha alguna. De pronto podemos pensar en cómo hacer llegar a las autoridades competentes nuestras propuestas de jueces – y necesariamente hacer un sondeo informal de quienes sean los y las adecuados, ejercicio que realizó ReD en Bogotá frente a posibles comisionados para la Comisión para el Esclarecimiento.
A estas alturas entendemos mejor por qué ha costado el mismo tiempo llegar a parar aquí en el punto de víctimas, que resultó necesario para sacar los acuerdos parciales en los primeros tres puntos de la agenda: desde las comisiones de víctimas que visitaron La Habana hasta el último anuncio, lo que se deja entrever es un trabajo serio, novedoso y ejemplar. Tenemos la convicción que este elemento del acuerdo final será la herencia de Colombia tanto en la jurisprudencia de la justicia transicional, como para los futuros procesos de paz en el mundo.
Otro elemento que se dio a conocer con la firma del punto sobre la justicia transicional, fue la fecha definitiva para la firma del acuerdo final: el próximo 23 marzo.
Recursos:
http://coeuropa.org.co/?q=node/252