Reflexiones sobre la transformación personal y papel de las mujeres en la construcción de Paz
Tertulia Musical con Silvia O
Reflexiones sobre la transformación personal y papel de las mujeres en la construcción de Paz
21 de agosto de 2015
Bogotá
Silvia Ochoa es una cantante, diseñadora y conferencista antioqueña, con más de 20 años de trayectoria. Silvia O cantó muchas de las canciones de su nuevo álbum Tu amor me sostiene y le contó a Rodeemos el Diálogo sobre su compromiso con el empoderamiento femenino y la promoción del equilibrio de las mujeres desde su comunión con la vida.
En la tertulia musical, nos relató su historia, no solo desde hechos puntuales en su vida, sino también desde sus sentimientos, pasiones, luchas y miedos. Los cuales, para ella, representan las emociones que todas las mujeres han vivido en algún punto de su vida; temas como el cuerpo, el dolor, la desigualdad, pero también la esperanza, el amor, el equilibrio, la vida y la reivindicación femenina fueron centrales a lo largo de la noche.
La primera canción que cantó fue Todo me recuerda a ti dedicada a su primer novio, con quien construyó la primera noción del amor. Sin embargo, Silvia nos contó también el cambio de ese concepto con el paso del tiempo, desde un amor único e irremplazable hasta el que “te hace ver que debes amarte lo suficiente para seguir adelante, y conocer más de la vida y de ti mismo.”
Después su inquietud empezó a centrarse en la relación de las mujeres con el cuerpo, la preocupación por mantenerse bien y sanas. Nos mostró su cuestionamiento sobre ¿para quién queremos mantenernos atractivas y a costa de qué? a través de su canción Espejito. En ésta ella se pregunta cuanto necesita una mujer para ser aceptada por los demás. Lo cual pone de relieve, la importancia de que las mujeres se valoren así mismas y no en función de gustarles a los hombres.
Por ese entonces, confluyen dos procesos: por un lado, su atención se dirige a la sexualidad, y por el otro, el auge del reggaetón es notorio. Al escuchar las canciones de éste género se da cuenta que, en su mayoría, son peyorativas respecto a la mujer y las muestra de manera cosificada. Por tanto, a través de Sorry baby busca con el reggaetón reivindicar el género femenino; además, que las mujeres se sientan orgullosas de decir NO. En este momento de su carrera el eje de su trabajo es darle importancia a la independencia de la mujer.
En este proceso se encuentra con muchas mujeres que simplemente no pudieron decir no: muchos combatientes tomaron decisiones respecto a sus cuerpos e integridad sin preguntarles. En este momento Silvia decide que puede influir con su música y trabajar con ellas y con sus luchas. Algo realmente conmovedor es que no trata de hacerlo de forma agresiva, ni mostrando solamente lo sucedido con las mujeres que han sido víctimas de algún tipo de violencia; sino que busca mostrar la esperanza, el camino y la solución para estas mujeres. Hoy Silvia utiliza la música y el yoga como caminos para descubrir la sanación interior de mujeres víctimas de la violencia.
La importancia de la mujer como sostén de la familia y la sociedad es el centro de su canción Tu amor me sostiene, la cual está impregnada por la admiración y amor a su madre, quien siempre le recuerda el valor del amor y la inocencia que son fuente de una fuerza infinita. Silvia cerró la primera parte de la tertulia con Viceversa, una canción llena de fuerza, en la que cree profundamente y que ha reeditado varías veces porque siente que expresa las contradicciones que constituyen la experiencia de enamorarse. Así nos trasmitió su esperanza y alegría que son parte de las fuerzas que constituyen nuestras vidas.
En la segunda parte se hicieron preguntas y comentarios del público. De allí se desprendieron reflexiones importantes, como el papel tan crucial y transformador de la música en reconstrucción del tejido social e individual afectado por el conflicto; la necesidad de que las luchas por la igualdad de género y la reivindicación de las mujeres se de en conjunto con el trabajo tanto de hombres como de mujeres; y la importancia del transformación individual en el camino de lograr un cambio en la sociedad civil.
Silvia nos enseñó a no ver solo el problema, sino también la solución; a no ver el vaso medio vacío, sino medio lleno, y a darnos cuenta que en cada nosotros puede ocurrir una transformación persona que contribuya a que Colombia construyamos paz desde lo cotidiano; desde la música y la respiración.
La tertulia terminó con todos los asistentes cantando el coro de Ya nada es, la canción que cantó muchas veces con Juanes y fue número 1 en la radio colombiana en la década de los 90. Después, mientras algunos de miembros y amigos de ReD tomábamos una cerveza en el bar de Uniandinos, el grupo que tocaba en el bar le pidió subir al escenario, Silvia se unió al grupo y entre los asistentes al bar cerramos cantando entre sonrisas de esperanza: “era la piragua