Una oportunidad para la solidaridad, la auto reflexión y el diálogo
En esta época de incertidumbre, en Rodeemos el Diálogo ofrecemos nuestros principios de honestidad, generosidad, respeto, solidaridad, autocrítica y corresponsabilidad para contemplar cómo nos conectamos con el mundo que nos rodea. Estos principios sugieren una visión de cómo navegar en medio de los momentos difíciles que se avecinan, y quizás salir al otro lado como comunidades globales más conscientes.
A todos nos preocupa el futuro. Los sistemas de salud que atienden a los pacientes, y los trabajadores de primera línea que garantizan nuestra seguridad, están asumiendo una enorme carga. Los más vulnerables necesitan más que nunca nuestra solidaridad. Nuestras acciones cotidianas tienen el poder de proteger o poner en peligro vidas. La humanidad es un colectivo, y sólo cuidando los unos de los otros podemos retrasar el pico de casos de COVID-19 y reducir las tasas de mortalidad.
Hemos aprendido en nuestro trabajo de construcción de paz que de los desafíos más fuertes con frecuencia salimos más sabios y más unidos. Animamos a todos a tomar esta experiencia como una oportunidad para ser más amables con nosotros mismos y con los demás. Como un momento de reflexión personal, para acercarnos y estar más enraizados y conectados con nosotros mismos. Para pensar en quiénes somos y qué nos vincula con nuestro entorno; en lo interdependientes que somos todos en nuestra sociedad planetaria; y en lo frágiles que somos dentro de las fuerzas de la naturaleza. También es una oportunidad para pensar en cómo avanzar e imaginar un mundo mejor después de esta crisis. Les invitamos a rodear el diálogo: a seguir construyendo paz, al construir un presente consciente que allane el camino hacia un futuro diferente, reescribiendo sobre los errores del pasado y forjando una sociedad más justa e igualitaria.