Los desayunos de paz se realizan bajo la dirección de ReD Bogotá con el objetivo de reunir a diferentes conferencistas para que nos expliquen diferentes temas politicos relacionados con la paz de Colombia.
Acuerdo de Paz y nuevas ciudadanías: una conversación con Camilo Romero
El 20 de junio, en nuestro habitual Desayuno de Paz, hablamos con Camilo Romero, exgobernador de Nariño (2016-2019).
Camilo empezó el diálogo diciendo que, si tuviera que elegir una palabra para describirla relación entre la paz en Colombia y el departamento de Nariño, ésta sería “resiliencia”.
El exsenador y exgobernador afirmó que, si bien la firma del Acuerdo Final de Paz en 2016 fue un importante logro, su implementación ha sido limitada.
De manera similar a lo que ha ocurrido en muchas zonas del país, como explicó Camilo, en Nariño nunca llegó una presencia integral del Estado cuando las FARC se desmovilizaron. Esto llevó a que múltiples actores armados llegaran a los territorios que antes ocupaban las FARC.
Hoy hay por lo menos diez grupos armados diferentes en Nariño, por lo que, paradójicamente, la firma de la paz ha recrudecido el conflicto armado en muchas zonas del departamento. Así, el 2017, que debía ser el año de la implementación, se convirtió en el año del abandono estatal.
El punto cuatro del acuerdo, por ejemplo, en lo que se refiere a la sustitución voluntaria de cultivos de coca, no se ha implementado, como explicó Camilo. Si bien más de 60.000 familias campesinas mostraron voluntad para dejar de sembrar coca en Nariño, el Estado no solo incumplió con los programas de sustitución, sino que decidió retomar la fumigación aérea de los cultivos con glifosato. Una muestra más de la fallida guerra contra las drogas en el mundo, como afirmó el exgobernador.
Por otro lado, en diálogo con los asistentes, Camilo se mostró optimista frente a las nuevas ciudadanías en Colombia, que han llevado a que en las últimas elecciones locales candidatos que representan fuerzas políticas alternativas ganaran en siete de las principales ciudades del país.
Las multitudinarias manifestaciones de finales del 2019 son otra muestra del poder de esas nuevas ciudadanías y su reclamo frente a las viejas formas de hacer política. El desayuno concluyó con unas reflexiones de Camilo a propósito de la actualidad política del país. Para él, hay una palabra clave, que es resetear: resetear la lógica del poder. Según contó, es fundamental que en Colombia nos planteemos unos propósitos comunes para derrotar a las viejas lógicas de poder que han gobernado al país por 200 años. Su llamado fue a ir más allá de personalismos para construir propósitos urgentes, entre ellos la construcción de paz, la lucha contra la corrupción, la defensa de la vida y de los territorios, y la educación.
Memoria, literatura y la narrativa de paz de Jaime Garzón
En nuestro Desayuno de Paz del 13 de junio pasado, charlamos con Fernando González Santos, profesor de la Universidad Pedagógica en el programa de Educación Comunitaria y Derechos Humanos y autor de varios libros de ensayos y poesía y de tres novelas sobre los desaparecidos del Palacio de Justicia, el caso de Rosa Elvira Cely y la vida de Jaime Garzón.
Sobre este último, se trata su más reciente obra: “No habré vivido en vano”. Según explicó, esta novela va más allá del testimonio y busca ir al pensamiento de Jaime. Incluye un monólogo de Garzón en el que reflexiona sobre temas existenciales como el amor, la paz, el conocimiento, la muerte, el humor y el país.
“El ejercicio imaginativo y literario que nos da Jaime nos posibilita hacer un libro pedagógico que nos permite seguir imaginando. El libro no se trata sobre el asesinato de Jaime Garzón, trata sobre el asesinato de su memoria”, aclaró Fernando.
Se refirió a cómo hablar de la verdad, la memoria y los hechos. “Hay muchos planos de la verdad y cada uno tiene una función. La parte jurídica tiene un lenguaje particular: cómo se asesina, cómo se ha desaparecido, cómo se torturó, cómo se desplazó. Es un plano de la verdad directo, inmediato y sin tapujos: hay unos responsables y unas víctimas y a ese plano no hay que darle arandelas. Pero la literatura y el arte se encargan del paso del testimonio a la imaginación y la memoria es imaginación”.
Destacó el papel de la verdad literaria, que transita del testimonio a la imaginación para influenciar a la sociedad que no tiene cómo entender y conectarse con el dolor de una víctima. La literatura hace un homenaje porque resimboliza aquello que no podemos decir de otra manera.
“El libro permite recordar lo que uno no ha vivido y ese es el papel de la literatura. El arte logra conectar con la sensibilidad que por otros medios se opaca”.
Así, concluyó que existe una relación entre memoria y verdad mediada por la sensibilización en los trabajos literarios. Para Fernando, con la lectura, se puede crear memoria.
“Cuando se le dan las herramientas a las personas, el conocimiento puede aplicarse a salvar vidas”: Luis Aguilar
El 6 de junio hablamos con Luis Hernando Aguilar sobre experiencias de conflicto armado y desastres. Él es experto en emergencias humanitarias y gestión de la información del Sistema de Naciones Unidas. Ha trabajado en países como Colombia, Filipinas, Libia, Ghana, Sierra Leona, Siria, Bangladesh, Mozambique, Chile, Ecuador y Bolivia. Creador de Kitum Activismo Humanitario y coordinador general de Frena La Curva.
Hablamos sobre cómo se relacionan la gestión de riesgos y de desastres con la construcción de paz en países como Colombia, en el que se presentan simultáneamente varias crisis humanitarias. También sobre la participación ciudadana y tecnología, es decir, cómo recolectar información útil al “multiplicar los ojos y los oídos” en un contexto de emergencia, facilita una respuesta humanitaria. Luis destacó, por ejemplo, el uso y desarrollo de software libre con ocasión del terremoto en Ecuador, inspirados en la experiencia de Nairobi en 2008, cuando no era tan generalizado el uso de herramientas como Google Maps.
Luis llamó la atención sobre el papel del estado como el gran responsable de brindar asistencia de manera oportuna, si bien resaltó la posibilidad de los ciudadanos del común de contribuir a la gestión de desastres.
“Cuando se le dan las herramientas a las personas, cuando se le dan las rutas y la comprensión y la capacidad, el conocimiento de estas personas puede aplicarse a salvar vidas y aliviar el sufrimiento en coordinación con las autoridades”.
Solidaridad en medio del Covid-19
En un contexto de pandemia, en el que hay tanto afectados por el virus así como quienes han sufrido a causa de las medidas de aislamiento, es clave apelar a la participación activa de los ciudadanos. Para Luis, recolectar información, adoptar medidas de mitigación e identificar la oferta institucional y solidaria, son parte de un proceso que busca “facilitarle la vida a las personas que requieren algún tipo de asistencia”.
Francy Carranza, miembro de ReD y moderadora de la charla, destacó como puntos importantes:
- La tecnología tiene múltiples aristas. Puede ayudar en contextos de desastres, pero también su uso puede ser problemático cuando se aplica al rastreo y gestión de la información de los ciudadanos, y por otro lado, puede contribuir a la difusión de desinformación.
- Lo que está ocurriendo en Colombia en términos de desplazamiento forzado durante el confinamiento, en algunas zonas en donde se están reagrupando algunos grupos armados del conflicto, especialmente del Pacífico.
- La solidaridad y la corresponsabilidad que conllevan la acción ciudadana en el contexto del Covid-19.
“Estados Unidos y el uribismo comparten la creencia fundamental en la vía militar”: Adam Isacson
El pasado 30 de mayo hablamos con Adam Isacson, Director para Veeduría de Defensa en WOLA (Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos), sobre la política exterior de los Estados Unidos en Colombia, el principal destino de la ayuda estadounidense en la región.
Nos compartió su lectura alrededor de la llegada de militares norteamericanos y el rol de Estados Unidos en la guerra, así como en la construcción de paz en Colombia.
Destacó la coincidencia a nivel político y estratégico de Estados Unidos con el uribismo.
“No digo que EE.UU. apoya el paramilistarismo o que busca violar los derechos humanos, pero sí comparten una creencia fundamental en que la mejor manera de solucionar los problemas de Colombia es la vía militar.”
Para ello, Estados Unidos ha destinado una gran cantidad de recursos. En sus momentos de mayor cooperación ha llegado al pico de 600 millones de dólares anuales. De acuerdo con Isacson, el motivo por el cual el país prefiere invertir tanto en la solución militar es porque no tiene confianza en las instituciones civiles de Colombia, por eso opta por medidas más estrictas. Sin embargo, EE.UU. ha invertido muchos recursos en iniciativas como el Plan Colombia, sin gran impacto en la recuperación de la gobernanza en las áreas donde se implementó.
Isacson también se refirió al escepticismo de Estados Unidos frente a los procesos de paz en Colombia, que disminuyó durante la administración de Barack Obama y a las implicaciones de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca para la construcción de paz.
Para él, lo que distingue estos años del gobierno de Trump y su Consejo Nacional de Seguridad es que “Colombia ha tenido cierta suerte de quedar en el olvido”. La agenda ha girado sobre otros ejes distintos, entre ellos Venezuela, Cuba y la migración proveniente de Centroamérica.
“Colombia casi nunca entra en la conversación (…) y cuando piensan en Colombia están obsesionados con coca y Venezuela”.
A propósito de la llegada de militares estadounidenses al país, reiteró que los esfuerzos de “estabilizar territorios” a través de la presencia estatal fracasan si no hay un componente civil que permita establecer gobernabilidad.
Finalmente, Andrei Gómez, moderador de esta charla, resaltó como conclusiones importantes:
- La importancia de Cuba y Venezuela para entender lo que está sucediendo en Colombia.
- Ver la elección presidencial de noviembre en EE.UU. desde una lectura menos romántica de lo que implicaría una victoria de Joe Biden y menos apocalíptica en el caso de que se imponga Trump. En ambos casos habrá márgenes de acción.
- Desde Colombia, con el apoyo clave de organizaciones como Wola, la apuesta es seguir fortaleciendo la presión a la comunidad internacional y al gobierno colombiano en clave de construcción de paz.
El horizonte de la construcción de paz en medio de la pandemia
El sábado 16 de mayo, Rodeemos el Diálogo (ReD) se reunió en un desayuno virtual con Gonzalo Sánchez para discutir sobre el horizonte de la construcción de paz en medio de la pandemia. Gonzalo es un reconocido académico, fue Premio Nacional de Paz en el 2016 y se desempeñó como director del Centro Nacional de Memoria Histórica hasta el 2019. Actualmente, es Profesor Emérito de la Universidad Nacional de Colombia y miembro del Consejo Asesor de la Comisión de la Verdad.
Gonzalo hizo un diagnóstico general sobre la pandemia en clave de construcción de paz, para lo cual propuso considerar diferentes aspectos. Estos son: la incertidumbre; pensar la pandemia como doble articulación de determinantes naturales y de determinantes sociales; el riesgo que ésta trae a la paz en términos económicos y de voluntad política; cómo la pandemia puede invisibilizar o puede ser instrumentalizada para invisibilizar otros problemas de la sociedad; cómo la pandemia y la prolongación de sus efectos impacta la cotidianidad del trabajo del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición.
Gonzalo Sánchez Gómez, 2015. Fotografías por: César Romero para el CNMH.
En cuanto al contexto internacional, es necesario tomar en cuenta: la mundialización de la crisis y una des-mundialización de las solidaridades, la situación de alerta de las democracias, y reflexionar sobre ¿cómo hacer para que estas movilizaciones que existían como manifestación de recuperación de los espacios democráticos no sean capital perdido en el contexto de la pandemia?
A manera de conclusión, Andrei Gómez-Suárez (cofundador de ReD), moderador del desayuno, consideró cuatro grandes reflexiones planteadas por Gonzalo:
- En medio del “festival de las incertidumbres” de la pandemia necesitamos un pesimismo movilizador.
- La pandemia ha demostrado que la defensa de la vida y la paz son parte de un mismo propósito.
- La pandemia es una oportunidad para que el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición mire al pasado con vocación de futuro.
- Los jóvenes han sido clave en la defensa de la paz, hoy en el contexto de la pandemia, serán quienes mantengan viva la movilización por la defensa de la vida en democracia.
El sargento César Augusto Lasso, víctima de secuestro, y su experiencia de reconciliación
El sábado 9 de mayo, César Augusto Lasso, que pasó 13 años en cautiverio a manos de las Farc, nos compartió anécdotas y aprendizajes de esa experiencia y cómo le apuesta hoy en día a la reconciliación en el país, reuniendo excombatientes y victimas a través de su trabajo como voluntario en Ágape, una fundación que le cambió la vida.
Lasso, sargento mayor de la Policía, fue secuestrado en 1998, en la toma de Mitú. Al comienzo se sentía culpable por no haber muerto ni haber resistido el ataque de la guerrilla. Nos compartió experiencias muy duras, como por ejemplo, que su esposa dio a luz a su primer hijo mientras él estaba en cautiverio y él solo se enteró dos años después. Nos contó que hablaba con los guerrilleros; le gustaba escuchar sus historias de vida y sus sueños, aunque esto era prohibido porque la guerrilla no quería humanizar a los secuestrados. Fue liberado en 2012.
Un retiro organizado por la Fundación Ágape en el que por primera vez se encontró con excombatientes de las Farc, lo motivó a trabajar temas de reconciliación. “No todos los malos son completamente malos ni los buenos son completamente buenos”, nos dijo a modo de reflexión.
Conoce más sobre la historia de este sargento mayor retirado, una víctima de secuestro que nos enseña sobre el valor del perdón.
“La empresa es un vehículo que puede aportar a la construcción de un mundo mejor, justo y solidario”
El sábado 2 de mayo, en un nuevo Desayuno de Paz, dialogamos con los gerentes de dos compañías de tecnología colombianas, Juan Carlos Álvarez (Luma) y Carolina Gómez (Quantum T&S) sobre la contribución de las empresas a la construcción de paz.
Ambos coincidieron en que la empresa es un vehículo que puede aportar a la construcción de un mundo mejor, justo y solidario. Así nació su apuesta de contribuir a un mundo mejor, a través de la reducción en un 20 por ciento del impacto ambiental de su actividad; justo, en términos de salarios para los empleados y solidario, motivando a sus trabajadores a cumplir sus sueños.
Para Juan Carlos y Carolina, hacer esos propósitos realidad implicó una transformación individual que los hizo conscientes de que podían impactar de manera positiva a otras personas, lo que se vio reflejado, en su caso particular, a nivel personal y en su entorno laboral.
Andrei Gómez, cofundador de ReD y moderador del Desayuno, concluyó cuatro enseñanzas de la experiencia de Juan Carlos y Carolina.
1. El error es siempre una posibilidad de aprendizaje.
2. La transformación es un proceso que nunca se detiene.
3. No hay mejor pedagogía que el ejemplo del cambio que uno quiere ver en el mundo. El resto son solo palabras.
4. La tecnología para cambiar el mundo es el diálogo, pues sólo allí es posible aprender del otro.
Un ejemplo de esto es el convenio entre Rodeemos el Diálogo y Quantum, que tuvo lugar entre marzo de 2018 y junio de 2019, que permitió que los empleados de la compañía aprendieran sobre mediación, resolución de conflictos y diálogo político. Es una muestra de que las empresas, sin importar su tamaño, pueden generar una transformación profunda para contribuir a construir un país en paz. Conoce más al respecto aquí.
Las víctimas colombianas en el exterior están trabajando por ayudar a cambiar el país
El sabado 25 de abril conversamos con John Jairo Romero, vocero de las víctimas en el exterior en la Mesa Nacional de Víctimas. Nos contó desde Valencia, España su historia y el trabajo para incluir en la política pública a las víctimas que se encuentran por fuera de Colombia.
John Jairo se refirió a la manera en que se logró una representación formal de las víctimas en el exterior, la unidad que se generó durante la campaña por el Sí en el plebiscito, la difícil situación de algunos connacionales en varios países, la expectativa frente a la decisión en relación con las 16 curules de paz; la articulación con el Sistema de Verdad, Justicia, Reparación y Garantías de No Repetición, entre otros temas.
Desayuno de Paz 24: el trabajo psicosocial a través de la cultura
Invitada: María Elisa Pinto
Desayuno de Paz 24
28 de julio, 2018
El día de hoy nos acompañó María Elisa Pinto, Directora ejecutiva de la Fundación Prolongar. María Elisa estudió gobierno y relaciones internacionales, sin embargo su otro gran interés era la música, y en algún momento se vio obligada a decidir entre estos dos caminos. Luego, cursó una maestría en Estudios de Paz y Conflictos en Japón.
La Fundación Prolongar y la violencia cultural
María Elisa comenzó contándonos que la variedad de influencias sobre ella la llevaron a creer que el trabajar con temas conflictivos no tenía que estar desvinculado de los valores empresariales, por ejemplo, la gestión con miras a costo-eficiencia y resultados medibles. También tiene claro que que el arte, si bien es un camino para abordar problemáticas, no es una panacea para todas las dificultades que vive Colombia.
En su maestría, María Elisa estudió la tesis de Johan Galtung, que propone un triángulo de violencias:
La violencia directa es el fenómeno más visible y reconocido. La violencia estructural se refire a estructuras deficientes que no cumplen las necesidades de las personas, y la cultural concierne actitudes, imaginarios y conductas que justifican o nos hacen ciegos ante los dos otros tipos de violencia. María Elisa identifica que la Fundación trabaja en función de ésta última.
La Fundación Prolongar fue fundada en 1988 por su madre, quien en esa época la gestionaba para servir a mayores de edad. Después se consiguieron recursos para trabajar con niños. Finalmente nuestra invitada tomó las riendas y la orientó hacia víctimas de lo que llamó la ‘guerra escondida’, en especial con personas víctimas de minas antipersonales.
En Japón, María Elisa había visto como se usaban canciones y coplas en el trabajo con víctimas y excombatientes. Se dio cuenta de que la cultura ofrecía muchas oportunidades en favor de la memoria y la empatía. Lo cual le posibilitó incorporar su gran interés por la música y, por extensión, la cultura en su praxis.
El ‘Kintsugi’ y la Sabiduría Popular
Otra herencia que le dejó su pasó por Japón fue conocer la técnica del kintsugi, que permite la reconstrucción de artículos rotos:
Tal y como lo ilustra la imagen, el principio se basa en no solo en evitar desechar lo roto, sino resaltarlo, de manera que el daño sufrido no se pierda ni se permita que el artículo deje de servir. Aquí María Elisa identificó un significado metafórico para su trabajo con víctimas. Ve la belleza de la imperfección, que a su vez ofrece un punto de entrada para reconocer la existencia de una historia detrás del objeto. Se sugirió que la historia entera de Colombia se puede comprender como objeto en necesidad de dicho remiendo.
Esta idea la empleó la Fundación en un proyecto en Vistahermosa (Meta) con víctimas con sus cuerpos dañados. A través del testimonio y resignificación del mismo, se resaltó el horror pero también el balance el sus procesos de reconstrucción. Es más, les permitió a los participantes verse como artistas.
En este y otros espacios donde ha implementado proyectos con el arte como medio y no fin, se registran mejoras de la memoria, la autoestima y la comunicación noviolenta, además de incentivar la imaginación. Ha comprobado que el arte permite desmontar imágenes establecidas y desarrollar nuevas relaciones sujeto-entorno.
Otro proyecto que la Fundación ha adelantado, junto con Álvaro Cardona, presente también en nuestro desayuno, es él de Sabiduría Popular, una serie de videos en línea que toman refranes populares (‘no hay que dar papaya’, ‘por algo lo mataron’, ‘estamos en la olla’) dándoles nuevas interpretaciones a través de entrevistas con gente del común. Estos videos están disponibles en http://fundacionprolongar.org/ pero la idea es proyectarlos en Cine Colombia previo al comienzo de funciones de cartelera en un futuro próximo.
La costo-eficiencia
María Elisa resaltó el elemento de la costo-eficiencia en sus métodos. Por ejemplo, talleres que abordan daños psicosociales a través de la cultura se llevan a cabo mejor en grupo. Además de generarse una interacción interpersonal, son más baratos y eficientes.
Conclusión
Se reconoció la necesidad de replicar estos métodos y materiales en más espacios de forma sostenible, y en especial para las personas aún indiferentes a las problemáticas que experimenta el país. María Elisa nos dejó convencidos del papel del arte como el ‘pegante’ en este proceso de reconstrucción, y ReD se dispuso para esta tarea, comprometiéndose a difundir los videos de Sabiduría Popularen sus espacios de pedagogía.