El cuarto Encuentro por la Verdad: la verdad de los campesinos víctimas del conflicto

Snapshot de la Comisión de la Verdad # 8

Una meta fundamental de la Comisión de la Verdad en Colombia es sentar las bases para la reconciliación en el país, un proceso con múltiples retos, complejidades y emociones. Alcanzar la reconciliación en el país en un nivel personal, entre individuos y al interior de las comunidades, es una cosa, la otra es reconciliar a toda la sociedad, que está conformada por personas con diferentes trayectorias de vida. En este snapshot, discutimos el Cuarto Encuentro por la Verdad, que se centró en las experiencias de campesinos, en un esfuerzo por construir puentes entre la Colombia rural y urbana.  

El evento, que se realizó en Cabrera, en el corazón del Sumapaz, el 12 y 13 de Diciembre de 2019, fue un espacio también para hacer un reconocimiento público del trabajo del Comisionado Alfredo Molano, quien falleció en Octubre de 2019. Molano fue escritor, sociólogo y Comisionado de la CEV, y dedicó su vida a viajar el campo colombiano y visibilizar las voces de grupos marginalizados, viviendo la realidad del conflicto armado de primera mano. 

Muchos eventos emblemáticos y centrales del conflicto armado colombiano se han desarrollado en las zonas rurales. De acuerdo con el Registro Único de Víctimas, aproximadamente 6 millones de personas víctimas de desplazamiento tienen orígenes rurales. Por ejemplo, Sumapaz ha sido testigo de algunos de los conflictos más violentos en Colombia, incluso antes del nacimiento de las FARC como grupo armado, pero también ha sido un territorio donde se creó la primera Zona de Reserva Campesina en el país. 

Los objetivos de este Encuentro fueron: 1) reconocer el impacto del despojo de tierras y el desplazamiento de las comunidades rurales, sus vidas, culturas y tradiciones, 2) reconocer la estigmatización que ha enfrentado esta población, que es generalmente estereotipada como criminales, aliados de la guerrilla y del narcotráfico, y 3) reconocer su resistencia a lo largo de los años, a través de esfuerzos para reconstruir lazos comunitarios y movilizaciones colectivas para exigir el cumplimiento de sus derechos. 

En un esfuerzo construir puntos de encuentro entre el campo y la ciudad, la Comisión de la Verdad resaltó la importancia del rol de los campesinos en el manejo de los recursos naturales de Colombia, así como el cuidado de la biodiversidad, la promoción de fuentes de energía sostenibles y la soberanía alimentaria. De esta manera, este encuentro reconoció la labor de los campesinos como sujetos políticos legítimos y no solamente víctimas del conflicto armado, lo cual dignifica su valioso lugar en la sociedad.

Previo al desarrollo del encuentro, el Grupo de Trabajo de Género de la Comisión organizó una jornada de dos días con mujeres campesinas con el fin de identificar el impacto del conflicto armado en esta población. En este espacio se discutió sobre el rol de las mujeres en el cuidado de la familia, el impacto del despojo de tierras que ha llevado a la pérdida de miembros de la familia, su comunidad, territorio, estilos de vida y soberanía alimentaria; la violencia sexual; los efectos del desplazamiento, incluyendo cómo han sido recibidas en comunidades y han sido estereotipadas como pobres y sin educación; así como la necesidad de reconocer las luchas históricas de las mujeres por la restitución de tierras, procesos de reparación y compensación. 

Aunque todavía queda un largo camino por recorrer, este Encuentro por la Verdad representa un esfuerzo significativo para empezar a reparar el tejido social que se ha roto en Colombia, después de décadas de confrontación violenta y altos niveles de desconfianza en “el otro”. 

Este tema será desarrollado a profundidad en los próximos snapshots, donde nos centraremos en el trabajo de la Comisión de la Verdad sobre la economía ligada a las drogas y el conflicto armado, una meta clave para el 2020.



La reincorporación de las FARC: el panorama para 2020

Snapshot de Reincorporación #2

El Acuerdo Final de Paz firmado en 2016 puso en marcha la dejación de armas de las FARC -EP y su proceso de reincorporación política, social y económica. Como lo establece el Capítulo 3 del acuerdo, estos procesos buscan pasar la página del conflicto y hacer que las FARC-EP, junto con los colombianos, contribuyan activamente a la convivencia y a evitar el resurgimiento de la violencia. Después de tres años, este snapshot da un vistazo a lo que 2020 traerá en materia de reincorporación en Colombia.

Reincorporación Política

El acuerdo le permitió a las FARC-EP luchar con palabras en lugar de armas garantizando su transición a un nuevo partido político legal. La Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) fundada en 2017 tiene los mismos derechos que los demás partidos de participar en elecciones y de recibir un apoyo económico inicial y garantías de seguridad para sus miembros. Existen condiciones especiales en cuanto al numero de afiliados y al umbral electoral hasta el 2026 cuando el partido deberá cumplir los niveles requeridos. Además, la FARC tendrá 5 curules en el Senado y 5 en la Cámara de Representantes durante 2 periodos de gobierno. 

El 2020 es un año clave para que la FARC supere dos importantes retos internos que garanticen su permanencia:

  1. Divisiones internas 

En Agosto 2019, dos miembros de la dirigencia, Iván Márquez y Jesús Santrich, anunciaron su regreso a las armas y una ‘nueva etapa del conflicto armado’. En enero de 2020, se reportó un plan para asesinar a Rodrigo Londoño – Timochenko, actual jefe del partido. También se ha producido una fractura con algunas de sus bases que abandonaron el partido y otras figuras clave como la holandesa Tanja Nijmeijer quien renunció en enero. 

  1. Ampliar la participación

En las elecciones de 2018 y 2019, la FARC recibió poco respaldo. Las regiones de mayor influencia de las FARC-EP durante el conflicto no se han convertido en fuentes de apoyo popular para el partido FARC y el mayor éxito proviene de coaliciones, en particular con la Colombia Humana – UP. Es necesario que el partido se reforme e integre a un grupo más amplio y diverso de la sociedad. Una mayor participación ayudará a que surjan nuevas ideas para que el partido avance y mejore sus futuros resultados electorales.

  1. Reincorporación Social y Económica

La reincorporación es también para los excombatientes (y sus familias) que ingresan a la vida civil dentro de las normas y leyes estatales de acuerdo con sus necesidades e intereses. Para esto, cada persona recibe un “pago de normalización” único y una asignación mensual por un máximo de 8 años (equivalente al 90% del salario mínimo y otorgable solo si es inferior al umbral de ingresos). También se brinda acceso a programas sociales, talleres y capacitación, educación formal, pedagogía de paz y programas para crear proyectos productivos que garanticen su independencia como ciudadanos. Todo el apoyo, financiero o de otro tipo, depende de su compromiso continuo con el proceso y su cumplimiento con el sistema integral de justicia transicional.

Sin embargo, quedan serios desafíos, dos de los más apremiantes son:

  1. Seguridad

El último informe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia registra el 2019 como el año más violento para los excombatientes con 77 muertos. En total, desde la firma del acuerdo de paz, esta cifra supera los 170 con otros 29 atentados y 14 desapariciones. Este es un desafío no solo para aquellos que permanecen dentro de los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCRs) donde comenzaron el proceso. La gran mayoría de las víctimas provienen de un mayor grupo de excombatientes quienes no reciben la misma protección ahora que se encuentran fuera, viviendo con sus familias, en busca de mejores oportunidades en las ciudades o ubicados en Nuevos Puntos de Reagrupamiento (NPA) en otras partes del país. 

  1. Desafíos económicos

En los últimos tres años se ha visto cierto éxito en los proyectos productivos (agricultura, ecoturismo, canotaje y cerveza, entre otros) que generan ingresos y oportunidades para que los colombianos (y el mundo) conozcan “a los otros” participantes del conflicto. Sin embargo, solo 1 de cada 4 excombatientes se beneficia de estos proyectos. Además, muchos enfrentan una estigmatización continua con respecto al empleo y las oportunidades comerciales.


Rodeemos el Diálogo reconoce los avances en la reincorporación y entiende que este es un proceso a largo plazo. Sin embargo, nos preocupa el asesinato de miembros de la FARC. En 2020, se requiere un compromiso coherente y serio por parte del gobierno colombiano y el constante involucramiento de la FARC, el sector empresarial y la sociedad civil. En los siguientes snapshots compartiremos cómo se desarrollan algunos aspectos específicos del proceso dentro de los territorios.



Caso 003: Muertes ilegítimamente presentadas como bajas en combate por agentes del Estado o “falsos positivos”

Snapshot de Justicia Transicional #5

Pese a las dificultades para el funcionamiento de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) durante el 2019, el año terminó con un balance esperanzador para las víctimas y la sociedad civil. Dos casos han reflejado avances significativos en materia de verdad, de participación de las víctimas y del sometimiento de los presuntos victimarios a esta jurisdicción. El Caso 001 sobre secuestro (ver JTS 4), y el Caso 003 sobre ejecuciones extrajudiciales, han puesto en evidencia la responsabilidad tanto de las extintas FARC-EP, como de las Fuerzas Armadas. A diciembre de 2019, la JEP reportó que 12.234 personas se habían presentado voluntariamente a la JEP; 9.721 ex miembros de las FARC-EP y 2.429 de la Fuerza Pública. Este JTS se enfoca en el Caso 003.

Caso 003 y Corte Penal Internacional

La Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) tiene abierta una investigación preliminar en contra del Estado Colombiano desde el año 2004, por la comisión de crímenes de lesa humanidad. Entre ellos, los homicidios de civiles para presentarlos como miembros de actores armados ilegales dados de baja en combate, cometidos presuntamente por miembros de la Fuerzas Armadas de Colombia, conocidos como falsos positivos

Tras la firma del Acuerdo de Paz en 2016, la fiscal de la CPI, Fatou Bensouda, ha manifestado públicamente su apoyo al Acuerdo de Paz y especialmente a la JEP, recordando su permanente atención y seguimiento a los avances en materia de justicia e impunidad.

La existencia de un posible caso en la CPI, la vulnerabilidad de las víctimas, la gravedad y magnitud del hecho y su extensión en el territorio nacional fueron factores para la priorización del Caso No. 003 por la Sala de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad (SRVR). El caso se fundamenta en el Informe No. 005 de la Fiscalía General de la Nación (FGN) denominado “Muertes ilegitimamente presentadas como bajas en combate por agentes del Estado”1.

Las víctimas

El Informe de la FGN reportó 2.248 víctimas entre 1985 y 2016. A partir del año 2002 se observa un incremento sustancial de dicha práctica, el momento más crítico ocurrió entre 2006 y 2008. Las víctimas fueron principalmente pobladores de zonas rurales y personas en condiciones de vulnerabilidad. El 45% fueron campesinos señalados de estar relacionados con las guerrillas y el 30% trabajadores informales en las ciudades. Adicionalmente, se encuentran defensores de derechos humanos, sindicalistas, defensores de víctimas, minorías y derechos de las mujeres, personas LGTBI, indígenas, adolescentes y personas con discapacidad física o mental. A diciembre de 2019, 360 víctimas habían sido acreditadas en la JEP. 

Presuntos responsables

Los falsos positivos reconocidos por el Consejo de Estado como una práctica sistemática y generalizada en materia de violaciones de derechos humanos, ocurrieron en 29 de los 32 departamentos colombianos. Entre ellos, Antioquia reporta el mayor número de casos. De las ocho divisiones del Ejército, la Primera, Segunda, Cuarta y Séptima concentran el 60% de los casos; en estas se ha reportado la presunta responsabilidad de personas con posiciones de mando y altos rangos en la organización militar. 

De los 1.944 miembros que se acogieron de manera voluntaria a la JEP, 202 habían rendido versiones a diciembre de 2019, tres de ellos en rango de generales. La SRVR, a través de Auto 261 de 2019, ordenó al general (r) Mario Montoya Uribe, ex comandante del Ejército Nacional (2006-2008) y quien se acogió a la JEP en 2018, rendir versión el 12 de febrero de 2020. Su vinculación se debe a que ha sido nombrado en al menos 11 versiones rendidas por miembros de la fuerza pública y en diferentes informes allegados a la JEP. 

Avances

A través de las versiones rendidas por quienes se acogieron a la JEP, el 9 de diciembre de 2019 el país conoció de la primera diligencia de exhumación de 45 cuerpos de personas que fueron enterradas en el cementerio de Dabeiba, Antioquia, entre el 2005 y 2007. Esta diligencia fue llevada a cabo en el territorio con presencia de los Magistrados y militares que se acogieron a la JEP, quienes detallaron sus acciones y prácticas a lo largo del recorrido. Esta etapa de contrastación entre lo declarado y las pruebas recaudadas permitirá construir una verdad sobre hechos que se encontraban impunes. 


Rodeemos el Diálogo reconoce los importantes avances en el caso 003, el arduo trabajo de la JEP en la búsqueda de verdad y justicia a lo largo del 2019, y reafirma el compromiso de acompañamiento y visibilización de su trabajo en 2020.


Píldora de innovación

El derecho de las víctimas a la participación se garantiza en todas las etapas procesales. Incluso cuando la JEP ordena vincular a una persona para que rinda versión, como en el caso del general (r) Mario Montoya Uribe, la JEP ha dispuesto la participación de las víctimas y sus representantes.


Auto No. 005, Sala de Reconocimiento de Verdad, de Responsabilidad y de Determinación de los Hechos y Conductas, JEP. 17 July, 2017. En: https://relatoria.jep.gov.co/documentos/providencias/1/1/Auto_SRVR-005_17-julio-2018.pdf



Un recuento de la reincorporación en Colombia

Snapshot de Reincorporación #1

En Colombia han existido diferentes procesos de reintegración de excombatientes de grupos armados ilegales a la vida civil. Entre 1982 y 2006 más de 25.000 combatientes de las FARC-EP, ELN, M19, EPL y otras guerrillas se reintegraron a la vida civil. En 2006 se creó la Alta Consejería Presidencial para la Reintegración (ACR), entidad responsable de un nuevo programa de reintegración a largo plazo, para acoger a los integrantes de las AUC que hicieron parte de un proceso de paz con el gobierno colombiano. Este programa se fue transformando a través del tiempo para acoger a excombatientes de cualquier grupo armado ilegal que quisiera desmovilizarse y hacer parte del programa. Con la firma del Acuerdo de Paz de 2016 entre el Estado colombiano y las FARC-EP, la ACR se transformó en la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) para desarrollar un programa de reincorporación con los exguerrilleros de las FARC-EP.

La reincorporación de las FARC-EP

La reincorporación política, social y económica es un proceso mediante el cual los exguerrilleros que hicieron parte del FARC-EP y sus familias se reincorporan a la vida civil, de acuerdo a sus intereses. Este proceso contempla la transformación del grupo armado a un partido político legal y la estabilización social y económica de sus integrantes. La implementación en 2018 de una Política Nacional para la Reincorporación Social y Económica (PNRSE) de los ex integrantes de las FARC-EP y sus familiares, surge como respuesta a la necesidad de diseñar una política que posibilite este proceso, establecida en el Acuerdo de Paz.

El acuerdo contempla la creación del Consejo Nacional para la Reincorporación (CNR), el cual está compuesto por dos integrantes de las FARC-EP y dos del gobierno, y que se encarga de definir las actividades y el cronograma del proceso de reincorporación. Otra entidad vinculada es la ARN, encargada de la implementar y asesorar las actividades de este proceso con los exguerrilleros. Además, el proceso cuenta con el apoyo y seguimiento de varias instituciones y entidades como La Oficina del Alto Comisionado para la Paz, el Ministerio del Interior, el Ministerio de Trabajo y la Misión de las Naciones Unidas en Colombia.

Los retos de la reincorporación

El proceso de reincorporación de las FARC-EP tiene retos importantes por delante, siendo un pilar fundamental para la consolidación de la paz en Colombia. Uno de los mayores desafíos es la estigmatización de la población en proceso de reincorporación. Esta estigmatización es producida y reproducida diariamente a través de diferentes canales como lo son los medios de comunicación, las redes sociales, así como en la interlocución con algunos funcionarios públicos. Otro reto importante es el tema de la productividad económica, con solo un sexto de exguerrilleros en el proceso beneficiando de proyectos productivos. Además, el proceso de reincorporación ha tenido algunos incumplimientos por parte del gobierno colombiano que han entorpecido el flujo del proceso y la seguridad de los exguerrilleros. 


Rodeemos el Diálogo reconoce que hay avances importantes y resalta el compromiso continuo de la gran mayoría de los exguerrilleros frente a un proceso complejo. En los siguientes snapshots, compartiremos como ha evolucionado la reincorporación en la práctica, como sigue avanzando y que retos enfrenta.



Comisión de la Verdad: avances en 2019 y retos para el 2020

Snapshot de la Comisión de la Verdad # 7

Los anteriores Cuadernos de la Comisión de la Verdad de Rodeemos el Diálogo han discutido algunas de las innovaciones de la Comisión de la Verdad (CV) colombiana, que, de acuerdo con la experiencia internacional, cuenta con el marco legal más sofisticado de cualquier CV en el mundo, con un potencial real para sentar la base de una paz estable y duradera. Pasado un tercio de los 3 años que estará vigente la comisión, ofrecemos algunas reflexiones sobre el proceso de la CV en 2019 y resaltamos algunos de los retos clave que vienen para el 2020.

Logros claves en 2019   

  1. Escuchar

7000 testimonios fueron recolectados en el primer año. Este es un avance significativo que sugiere que las víctimas desean la paz y están dispuestas a compartir su verdad. 

28 Casas de la Verdad fueron abiertas en todo el país. Se evidencia un esfuerzo simbólico para incluir a las personas que viven en las zonas más marginalizadas y en sectores de difícil acceso en Colombia. 

Aproximadamente 200 entrevistas se han realizado con colombianos exiliados. La CV está ahora explorando nuevos territorios para incluir a la diáspora colombiana. 

La participación de antiguos líderes. En octubre de 2019, la CV realizó una entrevista pública con el ex-presidente Ernesto Samper Pizano. Se espera que más ex-presidentes y figuras públicas contribuyan en la búsqueda de la verdad en Colombia en los próximos meses. 

  1. Reconocimiento

Cuatro Encuentros por la Verdad se realizaron en 2019 para reconocer oficialmente las afectaciones que sufrieron las víctimas. El primero, en Cartagena, reconoció el impacto de la violencia sexual contra las mujeres y personas LGBTI; en Pasto, la resiliencia de las mujeres y familiares de personas desaparecidas fue reconocida; en Medellín, el foco fue sobre las personas que vivieron el conflicto cuando eran pequeños; y finalmente, en Cundinamarca, el reconocimiento se centró en los impactos del conflicto armado en la población campesina. 

Uno de los logros más importantes de la CV colombiana a la fecha es la participación de los perpetradores de todos los actores del conflicto armado y el reconocimiento de su responsabilidad. 

  1. Diálogo

La CV colombiana ha iniciado un diálogo nacional sobre lo que pasó durante el conflicto armado. Se han desarrollado 7 Diálogos por la No-repetición, con la participación de instituciones estatales, víctimas, líderes sociales, la comunidad internacional, medios de comunicación, organizaciones de la sociedad civil y empresas, entre otros. Estos diálogos son un espacio valioso para grupos marginalizados y perseguidos pues permite que sean escuchados y reconocidos como actores legítimos por parte de la CV y del Estado. 

  1. Reconciliación

La CV tiene una meta fundamental para promover la reconciliación en Colombia. En alianza con ABC Paz, la CV facilitó la mesa de trabajo: “Narrativas de ex-combatientes”, la cual reunió a antiguos miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN); Movimiento 19 de Abril (M19); Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia- Ejército del Pueblo (FARC-EP) y las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), entre otros. Los participantes se encontraron en repetidas ocasiones y firmaron un acuerdo con varios compromisos por la paz, el cual incluye el rechazo completo a la violencia y la posibilidad de volver a la guerra. Este es un logro excepcional pues demuestra que, a través del diálogo, incluso los enemigos pueden superar las diferencias. 

Retos Clave para el 2020 

A pesar de estos avances, la CV tiene que terminar de recoger testimonios antes de que termine este año para que se puedan integrar en el reporte final. También tienen que desarrollar una excelente estrategia de comunicaciones para socializar los resultados que logre invitar a la sociedad en general a reconocer la verdad. Les presentamos los tres retos que se vienen para el 2020: 

  1. Contexto polarizado

Un contexto polarizado y dividido puede ser una amenaza para un proceso de paz que ya se encuentra en un estado frágil. Las narrativas polarizadas son alimentadas por las redes sociales, los medios de comunicación y las conversaciones cotidianas de las personas. La CV debe desafiar esas narrativas.  

  1. Violencia recurrente 

Cientos de líderes sociales, ex-combatientes y defensores de los derechos humanos han sido asesinados desde la firma del acuerdo de paz en Noviembre de 2016. La CV debe enfrentar un reto sensible: incentivar los relatos de víctimas del conflicto y testigos claves que no han compartido sus historias por miedo de poner su vida en riesgo y garantizar su seguridad. 

  1. Reconocer narrativas que siguen siendo silenciadas/Marginalizadas 

Este año, la CV tiene que priorizar el reconocimiento de narrativas que continúan siendo silenciadas y marginalizadas en la memoria histórica de Colombia. En una entrevista, el presidente de la CV Francisco de Roux explicó que esto incluye, pero no está limitado a aclarar los vínculos entre las economías ilegales y los actores armados, el involucramiento del sector empresarial en el conflicto armado, así como el problema de la exclusión étnica y racial.  


Rodeemos el Diálogo reconoce los importantes logros alcanzados de la CV en 2019 y seguirá apoyando su trabajo en Colombia y en el exterior en 2020. En nuestros próximos cuadernos, seguiremos informando sobre los desarrollos y desafíos clave. 



Niños, niñas y adolescentes hablan en la Comisión de la Verdad

Snapshot de la Comisión de la Verdad # 6

“Hacemos un llamado a la sociedad para reflexionar sobre el impacto del conflicto en los niños y las niñas. Para considerar seriamente por qué los niños han tenido que enfrentar esta violencia”, Comisionada Patricia Tobón Yagarí, en una presentación en el Tercer Encuentro por la Verdad #NuncaMásNiñosYNiñasEnLaGuerra

Alrededor de 17.000 niños, niñas y adolescentes (NNA) han sido reclutados por grupos armados en Colombia. En el 2018, 293 NNA fueron reclutados forzosamente por grupos armados, de acuerdo con el Representante Especial de Niños y Niñas en el Conflicto Armado de la oficina de Naciones Unidas. 

En las últimas semanas se han aumentado las tensiones después de que un bombardeo a un grupo de disidentes de las desmovilizadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), causó la muerte de al menos 8 niños. 

En este snapshot, exploramos cómo está trabajando la Comisión de la Verdad (CEV) con niños, niñas y adolescentes para cultivar las semillas de una paz inclusiva. 

Enfoque en las juventudes 

La violencia ha impactado la vida de los niños y las niñas en Colombia de múltiples y nefastas maneras, lo cual ha dificultado su acceso a derechos fundamentales como la educación, la familia y salud. 

Develar esos impactos es uno de los focos de la CEV. Tal como lo reconoce la comisionada Angela Salazar, la paz en Colombia depende de la participación de personas jóvenes que han experimentado el conflicto de primera mano. La violencia que vivimos actualmente se ha transformado; ahora utiliza la tecnología, afecta nuevos espacios y puede ser mejor comprendida y confrontada por los jóvenes. 

Para lograr este objetivo, la CEV se ha estado reuniendo con organizaciones de la sociedad civil, incluyendo a ReD Joven, para el co-diseño de metodologías creativas e innovadoras para trabajar con niños y niñas y visibilizar sus voces en los esfuerzos de búsqueda de la verdad de Colombia. 

Tercer Encuentro por la Verdad: “Niños, niñas y adolescentes hablan en la Comisión de la Verdad”

El 22 y 23 de Noviembre, el tercer Encuentro por la Verdad se llevó a cabo en Medellín, para reconocer explícitamente el impacto del conflicto en las vidas de los NNA, teniendo en cuenta su diversidad cultural y regional, así como las condiciones sociales que han determinado sus múltiples experiencias en el marco del conflicto armado colombiano. 

Casi 20 personas que vivieron el conflicto durante su infancia, compartieron historias de reclutamiento forzado y estigmatización, desapariciones, tortura y violencia sexual, entre otras atrocidades. El evento también buscó reconocer cómo las personas jóvenes han resistido la violencia y reconstruido sus vidas. 

Este fue el primer Encuentro por la Verdad en el que los perpetradores de todos los actores del conflicto participaron. Rodrigo Londoño, presidente del Partido político FARC y ex-comandante de la guerrilla, Fredy Rendón, ex-comandante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), y Daladier Rivera, ex-comandante de las fuerzas armadas, participaron y pidieron perdón por el daño causado a los niños, niñas y adolescentes en sus filas. Este evento histórico había sido inimaginable antes del acuerdo de paz y debe ser reconocido como una evidencia concreta del progreso que ha tenido Colombia. 

“Bajo mi mando, y por más de 11 años, miles de familias en Urabá fueron afectadas” Fredy Rendón, Ex-comandante de las AUC reconociendo su responsabilidad. 

“Escuchando historias”: Metodologías innovadoras para la búsqueda de la verdad con niños y niñas. 

En Noviembre de 2019, ReD UK presentó El Árbol del Amor, un cortometraje escrito, ilustrado y animado por niños y niñas sobrevivientes del conflicto que hacen parte de la reserva Nasa de Jambaló en el Cauca, Colombia. La presentación contó con una sesión de diálogo con el productor Dr Mathew Charles.

El Árbol del Amor (Official Trailer Spanish 1080p) from Mathew Charles on Vimeo.

El cortometraje explora la complejidad del fenómeno del reclutamiento forzado y la vida de los niños y niñas soldados. También ha sido aceptado por la CV de Colombia como un testimonio oficial. 

Quisiera que a través de esas narrativas, niños, niñas o adultos de diferentes lugares puedan entender por lo que hemos tenido que pasar y que no nos juzguen, y que con nuestra historia, los que hacen la guerra nos escuchen”. Cita de la escena final del cortometraje El Árbol del Amor. 

Esta metodología innovadora usada en el cortometraje busca permitir a las personas reconstruir sus propias historias. A través de grupos focales y talleres, ejercicios de literatura y cartografía humana, los jóvenes que participaron re-crearon las historias reales, colectivas de antiguos niños, niñas y adolescentes soldados y sobrevivientes del conflicto, que se presentaban a través de dos personajes ficticios. Mathew describió este proceso como escuchar-historias y no contra historias, reconociendo que los y las jóvenes son los expertos en sus propias vidas. 

Innovaciones en la búsqueda de la verdad: La importancia de escuchar a los niños y las niñas

Durante el diálogo, Mathew sugirió que el incremento de la violencia en la region en los últimos meses, significa que no sería possible producer este cortometraje en este momento, lo cual es un recordatorio del momento tan grave que enfrenta Colombia teniendo en cuenta que los nuevos ciclos de violencia están costabdo la vida de los más jóvenes. 

Sin embargo, las innovaciones de la CV en metodologías alternativas, que motivan la participación activa de las personas jóvenes, pueden ayudar a prevenir que los NNA sean reclutados, violados o seducidos por el conflicto en el futuro. 

Es tiempo de escuchar a los niños y niñas en Colombia, así como sus demandas por la paz, tanto para la comprender la verdad en Colombia, como para las recomendaciones orientadas a la no repetición. 



Caso 001: Retención ilegal de personas por parte de las FARC-EP

Snapshot de Justicia Transicional #4

La retención ilegal de personas es una de las conductas que afectan gravemente el derecho fundamental a la libertad. El Estatuto de Roma, consagra en su artículo 7, sobre crímenes de lesa humanidad, la encarcelación u otra privación grave de la libertad física en violación de normas fundamentales de derecho internacional, y la desaparición forzada, esta última bajo el entendido de la aprehensión, la detención o el secuestro de personas por un Estado o una organización política, seguido de la negativa de dar información de su retención y/o paradero, con la intención de dejarla fuera del amparo de la ley.

El secuestro: una forma de operar de las FARC-EP

En Colombia, la anterior conducta ha sido conocida como secuestro. De acuerdo con los informes de la Fiscalía General de la Nación (FGN), el Centro de Memoria Histórica (CNMH) y las organizaciones de víctimas de secuestro, en 1993 las FARC-EP expresamente adoptaron en su Octava Conferencia el secuestro como una forma de operar que, posteriormente prohibieron en el 20121. No obstante, algunos secuestros ocurrieron con posterioridad a esta fecha. 

Según los informes, por medio del secuestro se buscaban al menos tres finalidades: 1) cobrar a familiares y allegados grandes sumas de dinero a cambio de la libertad del retenido, 2) presionar al gobierno nacional y 3) demostrar control sobre la población civil2.

Caso 001 contra las extintas FARC-EP por secuestro

La Sala de Reconocimiento de Verdad, de Responsabilidad y de Determinación de los Hechos y Conductas (en adelante Sala de Reconocimiento) de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), mediante Auto No. 002 del 4 de julio de 2018, asumió el conocimiento del Caso 001 de acuerdo con el Informe No. 2 presentado por la FGN, denominado Retención ilegal de personas por parte de las FARC-EP, con base en los criterios de priorización establecidos.

El Caso 001 es un caso de carácter nacional en contra de la extinta guerrilla de las FARC-EP, por su política de secuestro y las condiciones de cautiverio de civiles, policías y militares. A noviembre de 2019, la Sala de Reconocimiento ha acreditado 1276 víctimas, y recibido 7 informes de parte de la sociedad civil, que se suman a los de la FGN y el CNMH. 

Versiones individuales y colectivas de FARC-EP

Con la apertura de la etapa de reconocimiento de verdad, de responsabilidad y de determinación de los hechos y conductas, la Sala de Reconocimiento ha recibido versiones en dos escenarios, el individual y el colectivo. En el individual han participado 56 comparecientes que han brindado información sobre su mando y las operaciones en las que participaron. En el escenario colectivo, se han llevado a cabo diligencias con el Estado Mayor de las extintas FARC-EP, sobre las instrucciones dadas por los superiores a sus unidades militares para adelantar “retenciones”. Así mismo, se están adelantando ampliaciones de responsabilidad colectiva con los miembros de los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación

Este caso es uno de los siete más avanzados en la JEP gracias, entre otras causas, al compromiso de los comparecientes en el cumplimiento de sus responsabilidades con las víctimas y la jurisdicción. Quienes fallaron a dicho compromiso ya fueron excluidos de la JEP y, en consecuencia, sometidos a la jurisdicción ordinaria.  

Recomendaciones

Los procedimientos antes descritos han permitido identificar 25 años de la práctica de secuestro de las extintas FARC-EP, con un universo indeterminado de miles de víctimas, que puede seguirse ampliando antes de la emisión de sentencia por parte del Tribunal Especial para la Paz. 

Acreditarse como víctima proporciona la calidad de interviniente especial, lo cual permite participar en todas las instancias del proceso, así como tener acceso a las versiones individuales y colectivas, para posteriormente, emitir observaciones. 

Rodeemos el Diálogo celebra el avance de la JEP e invita a las víctimas de secuestro en Colombia y el exterior a acreditarse, y a quienes nos leen, a difundir esta información para que, quienes se consideren en derecho, soliciten su acreditación como víctimas en este caso.

Píldora de innovación

A diferencia de otros modelos de justicia transicional, la JEP no solo busca la responsabilidad de quienes ejecutaron el delito, sino también a quienes crearon las “política”. Por ejemplo, no juzga únicamente a quienes ejecutaron los secuestros, sino también a los responsables de la creación de la “política de secuestro”.


Auto No. 002, Sala de Reconocimiento de Verdad, de Responsabilidad y de Determinación de los Hechos y Conductas, JEP. 4 de julio de 2018. https://relatoria.jep.gov.co/documentos/providencias/1/1/Auto_SRVR-002_04-julio-2018.pdf

Ibídem



La Comisión de la Verdad colombiana: innovaciones y desafíos

Snapshot de la Comisión de la Verdad # 5

A medida que nos acercamos a tres años desde el acuerdo de paz negociado entre las FARC-EP y el estado colombiano, la Universidad de Bristol recibió a miembros de la Comisión de la Verdad de Colombia (CEV) para participar en ‘Verdad, memoria y diáspora: las semillas de la paz en Colombia ‘, una semana de diálogo transnacional y colaboración entre instituciones británicas y colombianas.

La semana de eventos sirvió como una oportunidad única para escuchar directamente de la CEV sobre las oportunidades y los desafíos enfrentados en la implementación del acuerdo de paz en este momento crucial en la historia de Colombia. Rodeemos el Diálogo participó en los eventos y organizó un diálogo público en el University College London, para difundir el trabajo de la CEV. En esta instantánea destacamos los mensajes clave compartidos.

Género e innovaciones pedagógicas

Alejandra Coll, del Grupo de Trabajo de Género en la CEV, abordó la pregunta: “¿Qué significa ser una Comisión de la Verdad feminista y de aprendizaje?” Juntos, ella y Ana Cristina Navarro, del Grupo de Trabajo de Pedagogía, discutieron sobre la innovación de la Comisión de la Verdad,  enfoques de género y pedagogía: dos cuestiones fundamentales en la agenda de consolidación de la paz en Colombia.

Cabe señalar que Colombia es la primera Comisión de la Verdad en tener un enfoque de género central en todo su mandato y, además, la pedagogía es uno de sus cuatro pilares operativos.

¿La sociedad colombiana y el sistema educativo colombiano adoptan la diversidad? Esta es una de las preguntas clave que debe abordarse a través del trabajo interseccional de la Comisión de la Verdad. Alejandra Coll describió la importancia de descubrir las formas en que el racismo, el patriarcado y la misoginia, el colonialismo y la pobreza han contribuido al conflicto en Colombia.

La CEV  puede hacer recomendaciones para abordar las desigualdades estructurales y estimular el cambio social y las políticas a largo plazo en su informe final, incluso a través de la educación.

La verdad sobre la “Colombia fuera de Colombia”

El comisionado Carlos Beristain comentó sobre el trabajo que se está haciendo para recopilar testimonios en “la Colombia fuera de Colombia”, para investigar cómo los colombianos que viven en el extranjero han experimentado el conflicto armado, muchos de los cuales se vieron obligados a abandonar el país en el exilio.

El Comisionado afirmó los desafíos de llevar a cabo procesos de búsqueda de la verdad en un contexto tan polarizado, donde las mentiras han sido institucionalizadas, el dolor internalizado y las fracturas sociales son profundas en la sociedad.

La CEV tiene la intención de crear nuevos espacios donde se puedan compartir recuerdos silenciados previamente. Los miembros del centro de organizaciones de la sociedad civil de la Comisión de la Verdad del Reino Unido se unieron a Carlos Beristain para reflexionar sobre sus esfuerzos para alentar a los colombianos del Reino Unido a dar su testimonio.

“Esperamos que se enamore de la comisión de la verdad y se convierta en el canal de comunicación entre las personas que quieren dar un testimonio y nosotros”, dijo Andrei Gómez Suárez, una de las personas que documentan entrevistas para la Comisión de la Verdad en el Reino Unido.

Los desafíos de trabajar en un contexto polarizado

Gonzalo Sánchez, ex director del Centro Nacional de Memoria Histórica de Colombia y miembro de la Junta Asesora de la Comisión de la Verdad, reflexionó sobre la memoria histórica y la consolidación de la paz en tiempos de polarización.

Gonzalo discutió la cuestión de quién produce el trabajo de memoria y para quién. Expresó su preocupación de que hoy en Colombia, la memoria y la verdad están siendo amenazadas por “narrativas tóxicas”, formadas por el odio, la venganza y el miedo, acumuladas durante años de conflicto y dirigidas por quienes se oponen al acuerdo de paz negociado.

Relacionado con esto está el tema de la legitimidad y la producción de memoria. Un desafío clave para la Comisión de la Verdad colombiana es garantizar que las voces marginadas, que históricamente han sido excluidas y discriminadas, sean escuchadas y tomadas en serio por el estado colombiano.

“Pareciera que estuviéramos transitando de la memoria de y para las víctimas, a la de y para los victimarios”

La oportunidad para la reconciliación

‘The Witness’ (El Testigo), una película sobre el fotógrafo Jesús Abad Colorado que ha documentado la violencia en Colombia durante más de 25 años, permitió a Gonzalo Sánchez y Lina Malagón, abogada de derechos humanos y profesora en la Universidad de Bristol, a reflexionar sobre si Colombia está madura para la reconciliación.

El documental cuenta las inspiradoras historias humanas de las personas en sus fotografías, explorando los temas pertinentes de resiliencia y perdón, y lo que significan para aquellos para quienes tanto está en juego. Según Gonzalo, el invaluable trabajo de memoria de Abad no solo para documentar, sino también para humanizar el conflicto, abrió la puerta para que las víctimas se pronunciaran.

Es hora de saber la verdad porque todos tenemos una historia que contar y tenemos que seguir adelante, expresó Lina, en un rotundo mensaje de esperanza.

Lecciones aprendidas

La búsqueda de la verdad en Colombia no terminará con la culminación del período de tres años de la CEV. Se espera que el informe final producido por la CEV vaya acompañado de esfuerzos significativos para promover el diálogo, la reconciliación y la convivencia en Colombia, y cree las condiciones propicias para la paz.

Por lo tanto, si usted es colombiano o amigo de Colombia en el Reino Unido, lo invitamos a conocer más sobre la CEV, conectarse con el proceso de justicia transicional del país y apoyar los esfuerzos de consolidación de la paz. Lo invitamos a mantenerse en contacto y a rodear a la CEV con nosotros.



Los 7 casos en la JEP

Snapshot de Justicia Transicional #3

La lucha contra la impunidad, uno de los mandatos de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), ha venido ejecutándose a través de la apertura de casos en los que se analiza e investiga la comisión de los delitos más graves cometidos en razón del conflicto armado. A través de un enfoque contextual, la JEP procura la comprensión y la construcción de la verdad sobre las causas del conflicto como elemento para garantizar la no repetición. 

A octubre de 2019, la JEP ha abierto siete casos, que se pueden agrupar de acuerdo con sus características comune, así: 1) casos en los que se investigan y analizan una serie de delitos y de presuntos responsables en un contexto territorial específico, 2) casos en los que se investigan y analizan conductas delictivas sobre determinados presuntos responsables, sin la definición de un territorio, y 3) casos en los que se investigan y analizan conductas delictivas cometidas sobre un universo de víctimas determinado. 

Casos en contextos territoriales específicos

Hacen parte de este grupo los Casos 002, 004 y 005. En estos, la JEP priorizó el estudio la situación territorial de diferentes municipios que han sido históricamente afectados de manera grave por el conflicto armado. En el Caso 002 se investiga la situación de los municipios de Ricaurte, Tumaco y Barbacoas, en el departamento de Nariño. El Caso 004 trata de la situación territorial de la región de Urabá, en los departamentos de Antioquia y Chocó. En el Caso 005 se investiga y analiza la situación territorial de los municipios de Santader de Quilichao, Suárez, Bueno Aires y Morales, ubicados en el norte del departamento del Cauca. 

Casos sobre presuntos responsables

En este grupo se analizan e investigan los Casos 001 y 003. El primero se concentra en la conducta delictiva de retención ilegal conocida como “secuestro” específicamente cometida por parte de las FARC-EP. Bajo el mismo criterio, entendiendo que en el conflicto armado colombiano los agentes del Estado también son un actor, el Caso 003 se concentra en las muertes ilegítimamente presentadas como bajas por estos actores, conocidas como “falsos positivos”. Sobre este último caso es importante recordar que la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) tiene la situación de Colombia bajo examen preliminar desde el 2004, ya que ha señalado que existe fundamento razonable para creer que en Colombia se han cometido crímenes de lesa humanidad. En este sentido la Fiscalía de la CPI ha indicado públicamente su respaldo a la JEP, recordando su permanente observancia sobre la efectividad de los procesos en materia de impunidad como garantía de los derechos de las víctimas, factor que incidirá en la decisión de apertura de una futura investigación en la CPI. 

Casos sobre universos de víctimas determinados

En este grupo están los Casos 006 y 007. El Caso 006 trata de la victimización de miembros de la Unión Patriótica-UP, partido político que surgió en 1984 tras el acuerdo político entre las FARC-EP y el Gobierno Nacional en cabeza de Belisario Betancur, que permitió a la insurgencia hacer política legalmente y con garantías. Tras el alcance de diferentes cargos de elección popular en el Congreso y en las regiones, durante los ochenta y los noventa sus miembros fueron perseguidos y asesinados, en lo que se conoce como “genocidio de la UP”. A pesar de que la Fiscalía General de la Nación en Colombia ha declarado los asesinatos de los miembros de la UP como crímenes de lesa humanidad, los casos continúan impunes. Finalmente, el Caso 007, es el más reciente y se enfoca en el reclutamiento de niños y niñas en el conflicto armado, como universo determinado de víctimas. 

Conclusión: La JEP avanza en desmontar la impunidad

Para el avance de la investigación y el análisis en cada uno de los Casos, a 22 de agosto de 2019, la JEP había realizado 51 audiencias y 162 versiones. De acuerdo con la información oficial, del total de actas firmadas por quienes se acogieron a la JEP, 81% pertenecen a las FARC-EP, 18,4% a la Fuerza Pública y 0.5% a agentes del Estado diferentes a la Fuerza Pública. 


Debido a la importancia de los casos, desde Rodeemos el Diálogo podemos ver que la JEP avanza, lo cual nos llena de esperanza porque se empieza a desmontar la impunidad en Colombia. En los próximos snapshots informaremos en detalle sobre los casos y los avances en las investigaciones. 



Conflicto y exilio: construcción de paz más allá de la frontera nacional

Snapshot de la Comisión de la Verdad # 4

01 octubre 2019

El desplazamiento forzado ha sido reconocido como una resultado del conflicto armado en Colombia, a veces obligando a las víctimas a abandonar el país en el exilio. Como parte de su mandato, la Comisión para el esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición (en adelante, la Comisión de la Verdad) tiene el ambicioso objetivo de recopilar testimonios de todo el mundo para que la diáspora pueda participar plenamente en el proceso de verdad de su país.

Según el Registro Nacional de Víctimas, hay más de 8,500,000 víctimas del conflicto armado y 7,500,000 víctimas de desplazamiento forzado. No se sabe exactamente cuántas víctimas viven en el extranjero, pero el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) estima que son aproximadamente 400,000, y es probable que esta cifra sea aún mayor.

Los colombianos que se vieron obligados a cruzar las fronteras nacionales ahora viven en países vecinos, como paises Europeos, Estados Unidos y Canadá. Pero mudarse ha traído consigo nuevos desafíos y muchos se han re-traumatizado por el impacto de la discriminación, el aislamiento, la pérdida y la culpa.

¿Cómo puede participar la diáspora en una Comisión de la Verdad?

La Comisión de la Verdad está trabajando en 18 países, incluidos Canadá, Ecuador, Argentina, Costa Rica, Francia, Suiza, Alemania, España y el Reino Unido, para escuchar los testimonios de los colombianos que huyeron del país durante el conflicto y para descubrir y explicar por qué muchas personas fueron obligadas a irse. Otro objetivo fundamental de la Comisión de la Verdad es hacer que sus experiencias, que son relativamente desconocidas en Colombia, sean visibles en la memoria histórica del país.

Carlos Beristain es el Comisionado responsable de incluir a los miembros de una diáspora en el trabajo de la Comisión de la Verdad, que nunca antes se había llevado a cabo en un proceso de justicia de transición a esta escala.

En los primeros 10 meses de funcionamiento, la Comisión de la Verdad, dirigida por Beristain, ha estado trabajando con la sociedad civil y organizaciones de víctimas en todo el mundo para generar confianza, informar a las personas sobre el mandato y el proceso de la comisión y para aprender más sobre sus expectativas, necesidades y preocupaciones. Hasta el momento, se han capacitado más de 120 personas, que operan desde “nodos” específicos de cada país para recoger los testimonios de colombianos que viven en el exilio y para apoyar la estrategia de pedagogía y difusión de la comisión.

La búsqueda de la verdad en Europa

En mayo de 2019, la Comisión de la Verdad firmó un acuerdo formal con el Instituto Catalán Internacional para la Paz (ICIP) para facilitar el trabajo con las víctimas del conflicto en Europa.

El ICIP ejercerá el papel de la secretaría técnica de la Comisión de la Verdad en Europa para coordinar las diferentes organizaciones de “nodos” y grupos de trabajo de los países y ofrecerá apoyo técnico, metodológico y logístico.

En marzo de 2019, esta colaboración reunió a cuarenta participantes con experiencia trabajando con víctimas del conflicto armado colombiano, en un taller diseñado para facilitar la capacitación de quienes recogen testimonios.

Si desea obtener más información sobre lo que está haciendo la Comisión de la Verdad para trabajar con las víctimas colombianas que viven en el exilio en el Reino Unido, únase a Carlos Beristain en la Universidad de Bristol a finales de este mes, donde dará un discurso de apertura seguido de una Q & A y un panel con el equipo a cargo de tomar testimonios, parte del nodo de la Comisión de la Verdad en el Reino Unido.

¿Cuando? Viernes, 18 de octubre de 2019, 16:00 – 19:00

¿Dónde? 4.10 Escuela de Educación, 35 Berkeley Square, Bristol, BS8 1JA